Experiencia en un Crucero por el Danubio. Otra forma de descubrir el corazón de Europa

¿Alguna vez habías pensado vivir una experiencia en un Crucero por el Danubio? Lo cierto es que nosotros no nos lo habíamos planteado. En general, los cruceros no son el tipo de viaje que solemos elegir. Preferimos viajar con más libertad y teniendo la posibilidad de decidirlo absolutamente todo y de cambiar de planes en cualquier momento. Aun así, este año hemos tenido la oportunidad de hacer este viaje y tenemos que decir que, ¡¡lo hemos disfrutado a tope!!

Y por eso os traemos este post. Para que descubráis un poquito más cómo es una experiencia en un crucero por el Danubio y si puede ser vuestro próximo destino. Porque sí. No os vamos a engañar, es un viaje diferente. Y hay que tomárselo de una forma distinta. Pero hay barcos e itinerarios para (casi) todos los gustos.

⭐ Dale al play y embárcate con nosotros en esta aventura ⭐

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✅ El río Danubio, el corazón de Europa

El Danubio es uno de los ríos más importantes de Europa (el segundo más largo después del Volga). Y, seguramente desde que Johann Strauss compusiera en 1866 su incomparable vals del Danubio Azul, que si habéis dado al play estaréis oyendo ahora mismo, todo el mundo ha oído mencionar su nombre.

El río nace en la Selva Negra, en Alemania. Y desde allí hasta su desembocadura en el Mar Negro, en Rumanía, cruza prácticamente de este a oeste todo el corazón europeo. Pasando por Alemania, Austria, Eslovaquia, Hungría, Croacia, Serbia, Bosnia, Bulgaria, Moldavia y Rumanía. Así que seguir su curso es una forma magistral de conocer unas pinceladas del centro de Europa.

Pero, antes de empezar, dejadnos daros cinco pinceladas del Danubio en datos:

• • Tiene una longitud de 2.888 kilómetros.
  • Atraviesa 10 países, 4 capitales e infinidad de pueblos y ciudades.
  • Tiene más de 35 afluentes mayores (e incontables menores).
  • Hay más de 15 Parques Nacionales en su recorrido.
  • Además de distintas reservas de protección y patrimonio de la UNESCO.

Y ahora sí que sí, ¿empezamos?

✨ Experiencia en un Crucero por el Danubio

Pues bien, como ya hemos dicho, a lo largo del río hay infinidad de ciudades y pueblos que se suceden y que tienen puertos y embarcaderos en el río. Pero aquí os vamos a dejar un resumen de las principales paradas que se suelen hacer. Y después os hablaremos también de los itinerarios más populares y de algunas empresas que los operan. Así como de nuestra propia experiencia.

¡¡Ojo, tened en cuenta que al ser estos cruceros un viaje muy popular entre el público americano que viene a “descubrir Europa”, la enorme mayoría de navieras sólo operan los servicios en inglés!! Pero más abajo os doy algunas alternativas si no domináis el idioma. Porque también hay algunas opciones en castellano.

✔️ Principales paradas posibles

Para que os hagáis una idea de la inmensidad del Danubio y de todos los lugares por los que pasa, os dejamos este supermapa del río. Y justo después os detallamos cuáles son las principales paradas que hacer.

Capitales europeas: las cuatro paradas que no hay que perderse.

• • Viena
  • Bratislava
  • Budapest
  • Belgrado

Otras ciudades y pueblos TOP: las más destacadas en las que suelen parar los cruceros.

• • Ratisbona (Regensburg, Alemania)
  • Passau (Alemania)
  • Eferding (Austria)
  • Linz (Austria)
  • Mauthausen (Austria)
  • Melk (Austria)
  • Dürnstein (Austria)
  • Krems an der Donau (Austria)
  • Visegrád (Hungría)
  • Vác (Hungría)
  • Novi Sad (Serbia)
  • Puertas de Hierro (frontera Coracia-Rumanía)
  • Drobeta-Turnu-Severin (Rumanía)
  • Vidin (Bulgaria)

Sin embargo, además de estas paradas, es muy habitual que por la cercanía a otras ciudades muy populares, como Salzburgo o Cesky Krumlov, los cruceros organicen excursiones de medio día o de día completo alejándose un poco del cauce del río.

✔️ Itinerarios más populares

Os podréis imaginar que en sus casi tres mil kilómetros de cauce son infinidad los recorridos que se pueden hacer. Y aunque seguir su curso de cabo a rabo debe ser un viaje increíble, lo más normal es hacer pequeños tramos que no suelen superar la semana de duración. Diez días, como mucho.

Y, sin duda alguna, el itinerario más popular para disfrutar de una experiencia en un Crucero por el Danubio es el que recorre en ocho días el tramo entre Budapest y Baviera (ya sea hasta Passau, Ratisbona, Núremberg o cualquier otra ciudad). Y sea en el sentido que sea. Ya que es donde se suceden tres de las cuatro capitales que atraviesa el río.

A este itinerario es muy frecuente añadirle una extensión de 2-3 días por tierra a Praga, la capital de la República Checa. O incluso prolongar la navegación hasta los Países Bajos siguiendo el curso del canal Danubio-Main, el río Main y después el Rhin.

Por el contrario, otro itinerario menos conocido, aunque cada vez más solicitado, es el que discurre igualmente desde Budapest, pero hacia el este. Hacia Rumanía y la desembocadura en el Mar Negro.

⭐ Nuestra experiencia en un Crucero por el Danubio  

Ante todo, tenemos que decir que, aunque hay navieras de distintas categorías (y de las que hablaremos más adelante), en general la experiencia a bordo sigue prácticamente el mismo esquema en todos los cruceros fluviales: alojamiento en el tipo de camarote elegido, pensión completa (con o sin bebidas) y las principales excursiones incluidas.

En nuestro caso, ya que era la primera vez que navegábamos por Europa, hicimos el itinerario más clásico de todos: el de una semana desde Budapest hasta Núremberg. Con un programa que incluía absolutamente todas las visitas, algunos días hasta con varias opciones entre las que nos costó elegir. Y este fue exactamente el itinerario que hicimos:

• • Día 1: Llegada a Budapest.
  • Día 2: Budapest
  • Día 3: Bratislava
  • Día 4: Viena
  • Día 5: Valle del Wachau
  • Día 6: Salzburgo
  • Día 7: Passau
  • Día 8: Núremberg. Regreso a casa.

¡¡Os lo detallamos todo a continuación!!

1º Día – Llegada a Budapest

El primer día de nuestra experiencia en un Crucero por el Danubio fue la llegada a la ciudad de Budapest. Aterrizamos cerca del mediodía, nos esperaban de la naviera para trasladarnos al barco, llegamos, hicimos el check-in y cuando entramos en el camarote, ¡¡ya estaba allí nuestro equipaje!!

Nos duchamos, nos arreglamos y fuimos al brindis de bienvenida antes de la cena. Donde nos explicaron cómo funcionaba el barco, los horarios de las comidas y actividades, y todo lo que teníamos que saber para disfrutar a tope del viaje.

2º Día – Budapest

El segundo día a bordo, después de un fantástico desayuno buffet, teníamos la mañana para disfrutar de Budapest. Podíamos elegir entre un city-tour guiado con concierto de piano incluido, un recorrido por la historia de los judíos húngaros en la ciudad, o una caminata para subir a la colina de Buda. Como no conocíamos Budapest y el día estaba muy lluvioso nos apuntamos al city-tour (que era mayoritariamente en bus). Y, pese a que no vimos en absoluto toda la ciudad, nos sirvió para enamorarnos de ella y querer volver.

Nuestra parada favorita fue en el Bastión de los Pescadores (la foto de arriba). Aunque el mercado central de Budapest, donde compramos la famosa paprika húngara; y el concierto de piano y órgano también nos fliparon.

Después volvimos a hacer una comida ligera en el buffet del barco y sobre las 15:00 zarpamos rumbo al oeste, disfrutando de las increíbles vistas de la ciudad. Sin duda, ¡¡el mejor momento del día!!

Por la tarde tuvimos el simulacro de evacuación y tiempo para descansar. Y a continuación fue la reunión informativa del día siguiente, el brindis del capitán y la primera cena de gala a bordo.

3º Día – Bratislava

Después de un completo desayuno, el tercer día hicimos la visita a la ciudad de Bratislava, la capital de Eslovaquia. Y lo cierto es que, ¡¡nos sorprendió muchísimo!! Nos pareció una ciudad supercuqui y agradable para pasear.

✏️ Lee el artículo completo que escribimos sobre el Bratislava AQUÍ ✏️

Tras la visita, regresamos al barco para el almuerzo buffet y para seguir navegando hacia Viena. Y esta vez sí que nos pusimos las botas. Ya que la cena nos la adelantaban a las 17 y nos la íbamos a saltar, ¡somos incapaces de cenar a esa hora!

El motivo de ese adelantamiento era que a las 19 teníamos que estar listos porque íbamos a ver una representación de ópera y ballet en el Palacio Liechtenstein, en Viena. Y, ¡¡wow!! Vale que no fue el mejor ballet ni la mejor ópera que hemos visto, pero sólo por el entorno fue una auténtica pasada.

¡Os dejamos un mini-vídeo!

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Por último, al volver al barco nos dieron una “recena”. Nos tenían preparadas unas soperas de Goulash calentito que nos sentaron de lujo.

4º Día – Viena

El cuarto día descubrimos que, además del buffet del desayuno, se podían pedir algunos platos a la carta. Y no nos pudimos resistir a unos Huevos Bennedict.

Luego, teníamos otra vez varios planes entre los que elegir. Por un lado, podíamos sumarnos a un city-tour por la ciudad de Viena, que fue lo que hicimos finalmente; por otro, podíamos ir al Museo Belvedere a enamorarnos de El Beso, de Gustav Klimt; y, por último, podíamos hacer una visita guiada al flamante Palacio Schönbrunn.

Después de estas visitas por la mañana, podíamos volver a comer al barco. Pero como no zarpábamos hasta las 19:30, decidimos quedarnos en el centro de Viena, comernos un Wiener Schnitzel y una Tarta Sacher, y seguir viendo la ciudad.

✏️ Puedes leer AQUÍ nuestro post completo sobre Viena✏️

Al final hasta tuvimos que correr un poco para llegar al barco, ducharnos y estar listos para la cena a bordo y el baile de después.

5º Día – Valle de Wachau

Ya el quinto día estábamos más cansados, pero seguíamos dispuestos a apuntarnos a todo. ¡¡Y había mucho a lo que apuntarse!!

A primera hora de la mañana, después del desayuno, atracamos en Dürnstein, un pueblecito encantador lleno de viñedos y albaricoques. Desembarcamos por libre y tuvimos un ratito para recorrerlo a nuestro aire.

Desde allí salía una excursión organizada en bici eléctrica para pedalear hasta Melk, la siguiente parada del barco, y hacer un picnic a mediodía. Pero cuando quisimos apuntarnos ya no había plazas libres. Así que nos quedamos en cubierta disfrutando de un día espléndido y de unas vistas de ensueño del Valle del Wachau.

Justo después del almuerzo buffet atracamos en Melk. Donde podíamos elegir entre dos excursiones y una actividad. Podíamos, por un lado, hacer la visita a la Abadía Benedictina de Melk del siglo XVIII; por otro, podíamos ir al Castillo de Artstetten, el hogar del archiduque Francisco Fernando, cuya muerte dio comiendo a la I Guerra Mundial; o, si lo preferíamos, también nos podíamos quedar a bordo donde se realizaría una cata de vinos y productos regionales.

Finalmente nos decantamos por visitar la Abadía de Melk y por quedarnos después paseando a nuestro aire por la ciudad.

✏️ Descubre AQUÍ nuestra visita a Dürnstein y Melk en el Valle del Wachau ✏️

Tras la visita, como todos los días, volvimos al barco con el tiempo justo de ducharnos y prepararnos para la charla diaria y la cena.

6º Día – Salzburgo

Llegando ya casi al final de nuestra experiencia en un Crucero por el Danubio, el sexto día era el día de las grandes excursiones. Teníamos que desayunar bien temprano porque, o bien nos íbamos a Salzburgo, o bien lo hacíamos a la ciudad medieval de Cesky Krumlov, en República Checa.

Nosotros elegimos ir a Salzburgo, la ciudad de la película Sonrisas y lágrimas y el hogar de nacimiento de Mozart. Y, aunque fueron cerca de dos horas de ida y otras tantas de vuelta, nos pareció una visita superimprescindible.

✏️ Lee nuestro artículo completo sobre Salzburgo AQUÍ ✏️

Como las dos excursiones eran de día completo, en vez de comer en el barco, teníamos pre-reservada la comida en un restaurante local. Y no estuvo nada mal, ¡pudimos probar el famosísimo Apfelstrudel!

Por la tarde nos llevaron al muelle donde debíamos embarcar y, sorprendentemente, tuvimos que esperar a que llegase el barco. Cuando lo hizo, nos recibieron con un té calentito para que entrásemos en calor y nos informaron de que la reunión de ese día era obligatoria. Nos echamos a temblar.

Resultó ser que el caudal del Danubio estaba muy bajo. Por eso se había retrasado el barco, porque necesitó más tiempo para cruzar las esclusas. Y por eso mismo, no podíamos continuar la navegación hasta nuestro destino. Porque las leyes no permiten navegar cuando el nivel del agua es inferior a unos parámetros.

Peeero, no debíamos preocuparnos. La tripulación del barco ya lo tenía todo pensado y no sólo no nos íbamos a perder nada, si no que podríamos hacer alguna que otra cosa extra. Así que nos olvidamos de todo y fuimos a cenar.

7º Día – Passau

Nuestro último día a bordo fue el día de los cambios de planes por el tema del caudal del río. Teóricamente ese día debíamos atracar en Ratisbona (Regensburg). Y allí podríamos hacer la visita guiada de la ciudad o navegar en ferry por la Garganta del Danubio para ver la Abadía de Weltenburg. Esas dos excursiones se mantuvieron, pero en lugar de llegar navegando, se iría en autobús. Lo que se traducía otra vez en excursiones de día completo y dos horas de autobús para ir y otras tantas para volver.

Por eso decidimos quedarnos con la excursión extra que nos ofrecieron de improviso que era sólo por la tarde. Así que por la mañana disfrutamos de la navegación y almorzamos temprano.

El barco atracaría después de ese almuerzo en Passau, donde pasaríamos la noche, así que podríamos hacer la visita de esta otra ciudad. Menos conocida, pero igualmente cargada de historia.

✏️ Te contamos todo lo que hay que ver en Passau AQUÍ ✏️

Después de la visita, nos arreglamos una vez más corriendo para el brindis de despedida con el capitán y para la última cena de gala. Tocaba menú italiano y de nada menos que, ¡¡seis platos!!

Después terminamos el día bailando todo lo posible con la pena de tener que despedirnos de tanta gente maravillosa que no pensábamos que conoceríamos.

8º Día – Regreso a casa

En teoría, si las condiciones del río lo hubieran permitido, el último día atracaríamos en Núremberg y desde allí, después del último desayuno, nos trasladarían al aeropuerto. En nuestro caso al de Múnich.

Sin embargo, estábamos en Passau. Pero eso no supuso ningún problema en absoluto. La tripulación del barco organizó todos los traslados para que todos llegásemos sanos y salvos a nuestros destinos. Y, de hecho, a nosotros nos vino muuucho mejor… ¡¡Desde Passau nos ahorramos media hora de trayecto al aeropuerto!!

Y así, entre muchos abrazos y alguna que otra lagrimita, nos despedimos de nuestros compañeros de viaje y de una tripulación maravillosa sin la que esta experiencia en un Crucero por el Danubio jamás hubiera podido ser tan especial.

☑️ Cómo elegir la mejor experiencia en un Crucero por el Danubio

Si os decidís a vivir una experiencia en un Crucero por el Danubio, enseguida veréis que hay una infinidad de navieras que operan otra infinidad de rutas. Sin diferencias o con diferencias muy sutiles. Y es superdifícil entender por qué barcos y rutas que parecen idénticas tienen unos precios tan diferentes.

En primer lugar, debéis saber que, en líneas generales, todos los barcos son iguales. Quiero decir, el esquema del barco es el mismo. Y sus dimensiones son casi exactas. Esto es así porque a veces atracan varios barcos en paralelo y hay que desembarcar cruzando de unos a otros. Todos tienen tres cubiertas con los camarotes a popa, prácticamente igual distribuidos, y las zonas comunes en proa. Y si veis sus mapas, no os extrañe que todos sean muy parecidos a este:

Entonces, ¿en qué se diferencian? Pues bien, en primer lugar, en la antigüedad del barco. Los hay más viejos y más modernos. E igualmente están decorados de distintas formas. Algunos os parecerán más bonitos y otros menos.

Pero fundamentalmente lo que marca la diferencia es el servicio. Qué está incluido y qué no. Habitualmente todos los itinerarios incluyen la pensión completa (desayuno y almuerzo tipo buffet, y cena a la carta) y las visitas imprescindibles. Pero además hay barcos que incluyen las bebidas en las comidas y otros que directamente son todo incluido. Del mismo modo, hay barcos en los que todas las visitas y excursiones entran en el precio y otros en los que sólo lo hacen las más básicas. Y hay navieras que hasta tienen gratuitamente el servicio de mayordomo y dos reposiciones de minibar al día.

Así que es en todos esos pequeños detalles en los que hay que fijarse para poder elegir la naviera y el barco ideal.

✔️ Principales navieras por categorías

Bueno, ya os hemos aclarado que, a grandes rasgos, todos los barcos son muy similares y que las mayores diferencias radican, no tanto en la estética, si no en los servicios que ofrecen. Y en base a estos podemos establecer tres categorías: estándar, premium y lujo.

Navieras estándar

Ante todo, hay que decir que NO es en absoluto una mala categoría. Los barcos más sencillos son siempre barcos catalogados, como mínimo, como 4* Superior. Así que ni tan mal.

Dentro de la categoría estándar encontramos, en general, los barcos más antiguos. Muchos de ellos son alquilados a turoperadores que los “chartean”. Es decir, que hacen salidas especiales para sus clientes. Y es aquí donde es más fácil encontrar salidas exclusivas en castellano.

Algunas de las empresas donde podéis buscar vuestro crucero ideal son:

• Catai (salidas en castellano y con vuelos incluidos desde España)
• Panavisión
• Crucemundo
• Croisieurope

Navieras premium

En el siguiente peldaño encontraríamos una serie de navieras con barcos de 4*Superior y 5* que, además, tienen un plus en el servicio sin necesidad de llegar al lujo y a los precios más altos.

Entre ellas no dejéis de echar un ojo a:

• Emerald y Emerald Spanic (estas últimas son salidas 100% en castellano y con algunos upgrades extra sobre las salidas Emerald clásicas).
• Avalon Waterways
• Viking Cruises (para muchos es lujo, sin embargo, sus programas no incluyen algunos de los servicios más populares que hay que pagar a parte, así que para nosotros se queda en categoría premium).

Navieras de lujo

Por último, para el público más exigente, hay una serie de navieras muy TOP que llevan cada experiencia en un Crucero por el Danubio al siguiente nivel. Sus barcos son siempre de 5* y de 5* Gran Lujo.

Y las más destacadas son éstas:

• Ama Waterways
• Scenic Luxury Cruises & Tours
• Crystal River Cruises
• Uniworld Boutique River Cruises (cruceros boutique en barcos que son una auténtica pasada).

✔️ Tipos de camarotes

Por último, como os decía antes, todos los barcos siguen un esquema muy similar. Y por lo tanto, al margen de la decoración, sus camarotes también son muy parecidos. Por lo que los podemos clasificar de la siguiente manera:

• Habitaciones «suites» estándar. Son las de la cubierta inferior. Son las más pequeñas y carecen de balcón. Sólo tienen una ventana en la parte superior.

• Habitaciones con balcón «balcony suites». Son la mayoría de habitaciones del puente intermedio y del superior. Son habitaciones ligeramente más grandes que las estándar y tienen, además, un balconcito francés. Dentro de esta categoría puede haber algunas habitaciones más grandes que otras (aparecen en distinto color en los mapas y puede que se las llame «junior balcony suites»). Ojo, que también hay barcos en los que las habitaciones del puente intermedio tienen una ventana francesa, pero no tienen balcón propiamente dicho.

• Habitaciones superiores «royal balcony suites, panorama suites, owner’s suites…». Es posible que tengan infinidad de nombres, pero son las habitaciones más top del barco y suelen ser pocas y estar en el puente superior. Son más grandes, tienen salón, incluyen balcones o ventanas panorámicas y pueden ser incluso de dos plantas.

Por último, hay que decir que todos los barcos disponen de varias habitaciones adaptadas a personas con movilidad reducida. Además, hay algunos que cuentan con un par de habitaciones individuales. Lo que no hay nunca son habitaciones triples.

Y, como es lógico, dependiendo del tipo de habitación que elijamos, también variará (y mucho en algunos casos) el precio del viaje.

⚠️ ¿Es o no es para mí un Crucero por el Danubio?

Pues bien, después de todo lo dicho, podemos afirmar que hay itinerarios y navieras para casi todos los bolsillos. Pero sí que tenemos que reconocer que por su naturaleza es un tipo de viaje que no gusta a todo el mundo. Aunque, como os decíamos al principio, también hay mucho prejuicio al respecto. A nosotros no nos atraía nadita y acabamos encantadísimos…

Pero, por eso mismo, os queremos dejar a modo de resumen los siguientes tips para saber si es o no es para vosotros un Crucero por el Danubio.

Creemos que puede ser vuestro viaje ideal si:

✅ Tenéis pocos días, pero ganas de conocer muchos sitios.

✅ Ya conocéis algunos de los lugares de la ruta o simplemente no os importa ver sólo unas pinceladas de cada uno.

✅ Queréis hacer un viaje relajado. Con tiempo para descansar cada día.

✅ Preferís no preocuparos de nada y que os lo den todo hecho.

✅ Viajáis con mayores o personas con movilidad reducida y buscáis un viaje en el que disfrutar todos juntos ➡ Tendréis excursiones para todos los niveles y gustos. Y, además, siempre habrá actividades y cuidados si alguien decide quedarse a bordo.

Pero, por el contrario, no creemos que sea para vosotros si:

❎ Queréis verlo todo en cada pueblo o ciudad.

❎ Os gusta recorrer los lugares con mucha calma.

❎ Preferís organizarlo todo vosotros y/o sois de ir decidiendo sobre la marcha.

❎ Sois un rabo de lagartija que no puede parar ni un segundo al día.

❎ Viajáis con niños pequeños. Ya que las actividades y el entretenimiento a bordo no están enfocados a ellos y, seguramente, se aburrirán mucho.

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¡Ah! Y si os preocupa el tema mareos, ¡¡olvidaos!! Yo me mareo sólo de pensar en poner un pie a bordo y sobreviví con creces. Sólo tenía que evitar mirar el agua si iba de espaldas cuando navegábamos a toda vela. De resto, ni enterarme.

Y hasta aquí todo lo que os podemos contar sobre nuestra experiencia en un Crucero por el Danubio. Sólo resaltar que este no es en ningún caso un artículo publicitario. Ni nadie nos ha dado nada por escribirlo. Os hemos contado de todo corazón todo lo que sabemos sobre este tipo de rutas y sobre cómo la vivimos nosotros. Por eso el único detalle que no os hemos desvelado es con qué naviera ni en qué barco viajamos. Pero como nos encantó y la recomendamos al 100%, si estáis pensando en hacer un viaje como el nuestro, podéis escribirnos a info@miventanaalmundo.com y estaremos encantados de decíroslo.

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Espero que esta guía para descubrir cómo es una experiencia en un Crucero por el Danubio os haya resultado superútil. Si tenéis cualquier duda o pregunta, os animo a dejar un comentario o escribirnos por email. ¡Hasta muy pronto viajerxs!

Y si queréis estar al tanto de todas las novedades, no dejéis de seguirnos en instagram: @miventanalmundo

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