Visitar Las Médulas de León: guía práctica para descubrirlas.

Si estáis pensando en hacer una escapada por León, Ponferrada o por toda la comarca del Bierzo, visitar las Médulas es una de las cosas que tenéis que incluir en vuestra ruta sí o sí. Porque resulta ser uno de los paisajes más singulares que nos podemos encontrar a lo largo y ancho de España. Y que os dejará irremediablemente alucinados. Más aún después de saber que en realidad se trata de una antiquísima y enorme mina de oro romana que estuvo en funcionamiento durante casi doscientos años. Y de la que se calcula que se extrajeron cerca de cinco toneladas del preciado metal en ese tiempo. Aun así, y pese a que la mano de obra era mayoritariamente esclava y por lo tanto muy barata, fue finalmente abandonada porque no resultada rentable. Dejando para la posteridad ese paisaje único.

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✅La historia de la mina romana

En torno a los años 20 a.C., el ejército romano, comandado por Octavio Augusto, el sucesor de Julio César y primer emperador de Roma, estaba inmerso en su conquista de Hispania. Al paso de sus tropas por la zona de las Médulas, se percataron del color rojizo del territorio. Y de que los Astures, por aquel entonces los habitantes de la región, bateaban la tierra en los ríos. Por lo que las tropas de Octavio Augusto no tardaron en descubrir que se encontraban ante un yacimiento de oro. ¡¡Nada más y nada menos!!

Así que decidieron establecerse allí y comenzar la explotación minera utilizando la técnica más moderna que existía entonces: el ruina montium. O lo que es lo mismo, el derrumbe de las montañas, literalmente. Para ello, se creaba una red de galerías que se llenaban de agua que previamente se había desviado y canalizado desde los ríos cercanos. De esta manera, la presión del agua dilataba el terreno y terminaba provocando que la tierra se derrumbase y corriese arrastrada por los torrentes de agua que se originaban. Así iba a parar a los lavaderos donde verdaderamente se obtenía el oro que se enviaba a Roma para acuñar monedas. Convirtiendo poco a poco el paraje de Las Médulas en lo que es hoy: una mina aurífera a cielo abierto.

Aunque en la actualidad, tanto la técnica de extracción como toda la infraestructura que requirió la mina de Las Médulas, están consideradas como una de las mayores obras de ingeniería de la antigüedad, lo cierto es que entonces debió suponer una catástrofe medioambiental de aúpa. Y parece mentira que aquella ambición desmedida y los estragos que causó en su día, nos hayan dejado hoy un entorno único y espectacular, declarado Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en 1997.

✈️ Cómo llegar

Para visitar Las Médulas, recorrer sus senderos y asomarse a sus miradores, es prácticamente imprescindible contar con un vehículo propio. El yacimiento arqueológico se encuentra muy cerquita del pueblo del mismo nombre, Las Médulas. Y lo cierto es que es bastante recóndito y no existe transporte público regular hasta allí (hay alguna línea de autobús a pueblos cercanos, pero no son muy factibles que digamos).

En cualquier caso, tranquilidad, si no disponéis de coche (moto o bici), siempre podéis apuntaros a una excursión guiada.

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Dicho esto, nuestro destino está al borde de la frontera con Ourense, en Galicia, y a unos 150 kilómetros de León, la capital de la provincia. Por lo que podemos decir que para visitar Las Médulas lo mejor es hacerlo desde uno de estos tres lugares:

• Ponferrada. Es la capital de la Comarca del Bierzo. Y está a tan sólo 25 kilómetros (unos 40 minutos) por la N-536 en dirección Carucedo.

• O Barco de Valdeorras. Es la primera gran población al otro lado de la frontera gallega. Se encuentra a 37 kilómetros, unos 45 minutos, primero por la N-120 (la autovía Vigo-Logroño) y después siguiendo por la N-536. También en dirección Carucedo.

• León. Aunque queda a 150 kilómetros, alrededor de dos horas en coche, si vais a estar varios días en la ciudad, merece la pena acercarse a visitar las Médulas. Sólo hay que conducir por la A-6 en dirección Ponferrada y después continuar por la N-536 a Carucedo.

✨ Visitar Las Médulas: qué ver

Una vez descubierto el origen de este asombroso paisaje y cómo se puede llegar hasta él, sólo nos queda desvelar qué ver al visitar las Médulas.

Existen varios senderos de los que os hablaremos a continuación para adentrarse por la mina y recorrerla palmo a palmo. Los hay de distintas duraciones, pero todos son en general bastante sencillos. Y, sea como sea, antes o después de la visita, también hay que disfrutar de las mejores vistas de la zona parando en el Mirador de Orellán.

Así que para que no os perdáis nada, os dejamos un resumen de todo lo que hay que ver en este mapa. Fue el que nos dieron en el centro de visitantes cuando fuimos a visitar Las Médulas. Y aparecen los principales senderos, miradores y servicios que se ofrecen en toda el área del yacimiento.

Mirador de Orellán

Quizás sea el lugar más imprescindible en el que todo aquel que se anime a visitar las Médulas tiene que parar. Y, de hecho, es el punto más visitado del yacimiento. Pero es que, ¡¡no es para menos!! Desde el Mirador de Orellán se tienen unas vistas panorámicas inigualables de las rojas colinas que emergen entre la vegetación.

Nuestra recomendación es que os acerquéis temprano, antes de adentraros más por el yacimiento. El acceso es muy fácil: sólo hay que conducir hasta el pueblo de Las Médulas y desde allí seguir las indicaciones al mirador. Al final, a unos cuantos metros del observatorio, podréis dejar el coche en un párking relativamente espacioso.

Galería de Orellán 

Sin mover el coche del aparcamiento, justo al ladito del mirador, se encuentra la Galería de Orellán (estaba cerrada cuando fuimos nosotros). El acceso se hace por una pequeña caseta que hay bajando unos escalones tras la que se esconde la entrada a una parte de los túneles de esa red hidráulica que los romanos excavaros hace más de dos mil años. Y desde donde se pueden ver las Médulas teniendo otra perspectiva del paisaje.

Su horario de apertura es de 11 a 14 y de 16 a 18, de noviembre a marzo; hasta las 19, de abril a junio y de septiembre a octubre; y hasta las 20 en julio y agosto. Tened en cuenta que los martes cierra. Y que el precio de la entrada es de 3€.

Centro de visitantes y visitas guiadas 

A continuación, para tener una visita de lo más completa, os recomendamos pasaros por en Centro de Visitantes, que se encuentra en el corazón del pueblo de las Médulas. Pero, ¡¡ojo!! el único aparcamiento disponible es el que se encuentra justo antes de entrar en la población. Así que dejad allí el coche. Porque más adelante no es posible hacerlo. Y sólo tendréis que andar unos 500 o 600 metros.

En el mismo centro os darán toda la información necesaria para que podáis visitar Las Médulas por libre. Pero creemos que, para empezar a descubrirlas, lo mejor es apuntarse a una de las visitas guiadas que organiza el personal del yacimiento. Es un recorrido sencillo y no muy largo, conocido habitualmente como senda corta. Son en total 3 kilómetros y sin apenas desnivel. Aunque la duración del recorrido es de unas dos horas porque explican un sinfín de detalles de historia de la mina, del paisaje y de las curiosidades de la flora y la fauna que lo habita.

Los horarios de apertura del Centro de Visitantes varían mucho a lo largo del año, por lo que es muy recomendable consultarlos en su web. Como también es muy recomendable, si estáis interesados en hacer la visita guiada, apuntarse con antelación. Su precio es de 5€ por persona y puede reservarse escribiendo a medulas@ccbierzo.com o llamando por teléfono (987 42 07 08 / 619 25 83 55).

⭐ O si preferís un recorrido más completo, podéis hacer esta Visita guiada por las Médulas ⭐

Los mejores senderos para visitar las Médulas 

Con la visita al Mirador y la Galería de Orellán y a continuación la ruta guiada, habremos echado con toda seguridad la mañana entera. O, al menos, unas cuatro horas. Pero si queréis complementarlo un poquitín más, hay varios senderos fáciles y muy bien señalizados que se pueden realizar sin problema:

• Senda de Valiñas. Es el recorrido que se hace con la visita guiada, pero un poquitín más largo (1 kilómetro más aproximadamente). Incluye también el acceso a la Cuevona y la Encantada, dos enormes cavidades excavadas en la roca que formaban parte de las galerías de la mina. Aunque en ocasiones su acceso está restringido por peligro de derrumbes. Esta ruta, además, cuenta con un desvío hacia el Mirador de Orellán. Pero cuidado porque la subida tiene tela…

• Senda perimetral. En lugar de adentrarse en el corazón del parque, esta senda recorre su perímetro. Atravesando un bosque de castaños centenarios y llegando hasta el Mirador y la Galería de Orellán. Son en total unos 14 kilómetros y la dificultad podríamos decir que es media. Aunque puede acortarse descendiendo desde el mirador a la Senda de Valiñas.

• Senda del Lago Somido. Es un desvío de la senda perimetral y de la de Valiñas que da acceso a un lago donde descansar y/o hacer un pícnic.
• Senda de los conventos. También es un desvío de la senda perimetral que acorta el camino (y el desnivel).

☕ Dónde comer en Las Médulas

Después de visitar las Médulas, sobre todo si habéis hecho una de las rutas a pie, necesitaréis reponer fuerzas. ¡¡Y qué bien se reponen con la exquisita comida leonesa y berciana!!

En el pueblo de Las Médulas hay varios restaurantes, todos ellos bastante turísticos, claro; pero nosotros os vamos a dejar aquí nuestra recomendación personal: el Bar Tapería O Camiño Real. Que se encuentra justo al lado del principal aparcamiento para visitar las Médulas, en un jardín superagradeble y con una estética un tanto estrafalaria o hippie, pero no creemos que haya mejor lugar para comer en la zona.

Cuando nos sentamos y vimos los precios en la carta nos impresionaron un poco. Tenemos que reconocer que pensamos que nos habíamos metido en una trampa para turistas donde todo era carísimo. Pero nada más lejos de la realidad. Los precios son los que son porque las raciones tienen un tamaño IMPRESIONANTE.

En nuestro caso, como pese al cansancio no teníamos mucha hambre, pedidos unos tomates aliñados y unos chichos (carne de cerdo adobada) con patatas. Y menuda sorpresa nos llevamos. De verdad que las fotos no le hacen ninguna justicia al tamaño de los platos.

Entre dos personas apenas nos comimos la mitad de los tomates y la mitad de la carne pese a que estaba ESPECTACULAR. Muy bueno, sabroso y casero. Pedimos todo lo que dejamos para llevar para cenar. Y, como no nos pudimos resistir, nos animamos a probar la tarta de queso y castañas, que también estaba de lujo. Así que 45€ por dos platos que nos sirvieron para una comida y una cena, un postre y cuatro cervezas, ¡ni tan mal!

⛺ Dónde dormir para visitar las Médulas

Aunque hay algunos alojamientos rurales en las inmediaciones del yacimiento de las Médulas, como os decíamos antes, lo más habitual (y creemos que lo más cómodo también) es alojarse en grandes poblaciones cercanas como Ponferrada o El Barco de Valdeorras. Y nuestra recomendación personal es hacerlo en “Ponfe”, la capital del Bierzo.

Concretamente en los Apartamentos Los Arroyos. Nosotros nos alojamos en uno de los apartamentos más sencillos que ofrecen, pero fue perfecto. Tiene absolutamente todo lo necesario, incluyendo todo tipo de vajilla y utensilios de cocina. Estaba limpísimo, era precioso, amplio y supercómodo (¡¡qué cama!!). Vamos, resumiendo, que nos pareció ideal para una estancia confortable en Ponferrada.

Como pega sólo diríamos que está algo alejado del casco histórico de la ciudad (unos 15-20 minutos a pie). Y, aunque tampoco dispone de párking, hay un aparcamiento público enorme (gratuito a partir de las 20h y los fines de semana) a una calle. Y en la propia calle del apartamento pudimos dejar el coche cada noche durante nuestra estancia.

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⭐ Otras visitas cercanas

Seguramente os parezca que visitar las Médulas, única y exclusivamente, implique hacer demasiados kilómetros desde otras zonas de la península, por lo que lo mejor es combinar la parada con otros lugares imprescindibles en la zona. Así que aquí os dejamos nuestras recomendaciones:

• Ponferrada, la capital de El Bierzo
• Villafranca del Bierzo
• Peñalba de Santiago y el Valle del Silencio
• Molinaseca, uno de los Pueblos Bonitos de España
• Santa María de Carracedo, un monasterio de la zona.
• Astorga y Castrillo de los Polvazares
• O Barco de Valdeorras.

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Y hasta aquí todo lo que os podemos contar sobre nuestra experiencia para visitar las Médulas. Un espectacular vestigio de la antigua Hispania romana.

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Espero que esta guía para visitar la mina abierta de Las Médulas os haya resultado superútil. Si tenéis cualquier duda o pregunta, os animo a dejar un comentario o escribirnos por email. ¡Hasta muy pronto viajerxs!

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