Ruta por la Costa Dálmata: descubriendo Zadar, Sibenik y Trogir.
La Costa Dálmata en la actualidad abarca realmente todo el territorio costero de Croacia, incluyendo su infinidad de islas y la península de Istria. Así como la pequeña costa de Bosnia y el desconocido litoral de Montenegro. Sin embargo, cuando se habla en general de la zona, suele pensarse en las tres grandes ciudades croatas que hay en ella: Dubrovnik, Split y Zadar. Que eran las que en la antigüedad constituían la costa de Dalmacia. Pero, puesto que tanto Split como Dubrovnik atesoran tantísimo patrimonio, merecen su propio capítulo, además de que es imposible abarcarlas todas en un único día. Por eso, en esta ruta por la Costa Dálmata nos vamos a centrar sólo en Zadar y sus dos hermanas pequeñas: Sibenik y Trogir.
¿Os animáis a descubrirlas?
⭐ Para organizar el viaje ideal, DESCUBRE todos los posts que hemos publicado sobre nuestro viaje a Croacia ⭐
¿Qué vas a encontrar aquí?
✅ Breve historia de Dalmacia y su costa
La Costa Dálmata actual, conocida como Dalmacia marítima desde la antigüedad, estuvo originalmente poblada Ilirios. Quienes compartieron el territorio mucho tiempo con colonias griegas. Aunque finalmente, como en prácticamente todo el mediterráneo, terminaron siendo vasallos del Imperio Romano hasta su caída en el siglo V.
A partir de ese momento, se establecieron en la región pueblos eslavos. Como los croatas, sorabos y liburnios. Pero no tardaron en rendir pleitesía a los emperadores francos. Y, posteriormente, en quedar bajo la soberanía del Imperio Bizantino. Las constantes incursiones piratas derivaron en sucesivas guerras con la República de Venecia. Que terminó por tomar el control de la Dalmacia marítima a finales del siglo X. Aunque no fue por mucho tiempo. Pues en 1052 el croata Kresimir Pedro, apodado Pedro el Grande, las reconquistó y se erigió de “Rey de Dalmacia y de Croacia”.
No obstante, la tranquilidad no duró demasiado. Ya que el medievo fue un tiempo igualmente convulso. En los siglos posteriores no dejaron de relevarse las invasiones francas, bizantinas y venecianas. Y estos últimos acabaron retomando el control de la costa en 1420. Siendo capaces de mantenerlo hasta que Napoleón a finales del siglo XVIII tomó la plaza y la incluyó en el Reino Napoleónico de Italia. Pasando a pertenecer a Austria tras la caída del mismo.
Y si pensabais que el siglo XX llevó la estabilidad, ¡nada más lejos de la realidad! Después de la I Guerra Mundial, Zadar, junto con Istria y las islas septentrionales, se incorporó a Italia. Mientras que el resto se integró en Yugoslavia. Después, durante la II Guerra Mundial, la Italia de Mussolini invadió la parte yugoslava. Aunque, tras la victoria aliada, toda Dalmacia quedó en manos de Yugoslavia hasta su desintegración. Cuando la Costa Dálmata pasó a pertenecer a Croacia, Bosnia y Montenegro.
✈️ Cómo llegar a la zona
Para hacer una ruta por la Costa Dálmata como la que os vamos a proponer, lo cierto es que es muy fácil llegar. Es una de las zonas más turísticas del país, así que las comunicaciones son más que abundantes.
Vamos, que se puede llegar por tierra, mar y aire. ¡Os lo detallamos a continuación!
- En coche. Para nosotros es sin duda alguna la mejor forma de llegar y de hacer cualquier ruta por la Costa Dálmata. Tan sólo hay que coger la autopista E65 que recorre el país de norte a sur e ir tomando los desvíos a las distintas poblaciones.
- En autobús. Gracias a esa misma autovía que vertebra toda Croacia, hay infinidad de autobuses que comunican Zadar, Sibenik y Trogir con prácticamente todas las demás ciudades del país. Tanto las más cercanas, como Split o Dubrovnik; como las más alejadas. Podéis consultar las rutas aquí.
- En tren. Los trenes en Croacia, además de escasos, son poco eficientes dado el deteriorado estado de las vías y la falta de infraestructuras del país. De hecho, Zadar y Trogir carecen de conexiones por tren. Pero Sibenik, sí. Así que es posible llegar en tren desde el norte y desde el sur. Aunque haciendo obligatoriamente un transbordo en Perkovic. Os dejamos la web oficial.
- En barco. Puesto que estamos hablando de una ruta por el litoral, hay distintas líneas de ferry que recorren la costa y la conectan con las islas y los países vecinos como Italia o Montenegro. No dejéis de consultar las opciones en este enlace.
- En avión. Zadar cuenta con un pequeño aeropuerto que ofrece conexiones con Zagreb y Rijeka, en el norte del país, durante todo el año. Así como con bastantes países europeos durante la temporada alta (el verano).
✨ Qué ver en una ruta por la Costa Dálmata
Como ya os adelantábamos, la costa de Dalmacia, en términos estrictamente literales, hace referencia a toda la costa croata, pero a efectos prácticos suele referirse al litoral que discurre desde Zadar hasta el extremo sur del país. Hasta Dubrovnik. Y nosotros, puesto que a Split y a la propia Dubrovnik les dedicamos más tiempo (y les dedicaremos también sus propios posts), en esta ruta por la Costa Dálmata de un día nos centramos en Zadar, Sibenik y Trogir. Y precisamente de esas tres ciudades os vamos a hablar a continuación.
Así que para que no os perdáis nada, os dejamos nuestro mapa de ruta:
Y ahora sí que sí, ¡empezamos!
⭐ Zadar
Si se hace una ruta por la Costa Dálmata de norte a sur, como la que hicimos nosotros y que os estamos proponiendo, la primera parada será en Zadar. Una ciudad de unos 75.000 habitantes, capital del condado homónimo, bañada por las aguas del mar Adriático. Que, además, puede presumir de ser uno de los rincones del país que más historia atesora entre sus muros. Gracias principalmente a su trepidante pasado en el que prácticamente todos los reinos e imperios del mundo antiguo se disputaron su control.
Probablemente gracias a esa enorme importancia ha llegado hasta nuestros días como uno de los principales núcleos turísticos de la Costa Dálmata. Y precisamente por eso las comunicaciones hacia y desde Zadar son bastante cómodas y fáciles. Pues, además de en avión (principalmente en temporada alta), es muy sencillo llegar a Zadar en ferry desde Pula, en Istria; o desde Ancona, en Italia. Por no hablar de que por carretera tan sólo hay que tomar la autopista E65 y seguir los carteles. O coger alguno de los autobuses que comunican la ciudad con el resto del país.
⛔ El casco antiguo de Zadar es completamente peatonal. Así que lo mejor es dejar el coche en alguno de los aparcamientos que hay en sus alrededores. La faena es que casi todos son de parquímetro y el tiempo es limitado. Aunque por la noche no hay que pagar. Nosotros estuvimos una noche y media mañana en el de la calle Vladimira Papafave (lo tenéis en el mapa) y apenas pagamos 2€ ⛔
Y ahora sí, una vez aparcado el coche, ¡¡os contamos todo lo que ver en Zadar!!
Foro Romano
Literalmente a un paso del aparcamiento que os acabamos de recomendar se encuentran los restos de lo que en su día fue el Foro Romano de Zadar. Para nosotros, ¡el mejor lugar para empezar esta ruta por la Costa Dálmata!
Apenas quedan unos trozos de algunas de las columnas que en tiempos de la ocupación romana de Dalmacia se alzaban en el que era el epicentro de la vida política, religiosa, comercial y social de la ciudad. Pero aun así no cuesta demasiado imaginarse el ajetreo que se debía vivir allí diariamente.
Iglesias de Santa María y San Donato
En la actualidad parte de ese espacio del foro lo ocupan dos iglesias: la de Santa María, al este; y la de San Donato, al oeste. La primera, la Iglesia de Santa María, que fue fundada como un monasterio benedictino en el siglo XI, alberga en su interior un Museo de Arte Sacro. Sin embargo, lo que más destacaría, si no fuera porque estaba andamiada, es su torre campanario. Conocida como la Torre de Koloman. Pues se erigió en 1105 en honor al homónimo rey húngaro de Croacia. Aunque todo el complejo que vemos en la actualidad es una reconstrucción del siglo pasado. Pues quedó seriamente dañado tras los bombardeos de la II Guerra Mundial.
Al lado de la iglesia también se puede visitar el Museo Arqueológico de Zadar. Que atesora objetos desde el paleolítico. Y justo en frente, al otro lado del foro, estaría la Iglesia de San Donato. Levantada en el siglo IX en estilo prerrománico y considerada el mejor ejemplo de ese periodo en toda Dalmacia.
Originalmente se consagró a la Sagrada Trinidad. Pero no tardó en cambiársele el nombre por el del obispo que había impulsado su construcción y que fue clave en las relaciones franco-bizantinas. Su interior, de planta redonda y amparado por una espectacular cúpula de 27 metros, alberga el relicario de plata de San Simeón. Además de presentar excepcionales muestras de arte carolingio y bizantino.
Aunque a nosotros lo que más nos llamó la atención es el Pilar de la Vergüenza. Un poste al que se encadenaba a los condenados junto a la fachada exterior de la iglesia para ajusticiarlos y avergonzarlos.
Catedral de Santa Anastasia
A muy poquitos pasos de la Iglesia de San Donato, prácticamente adosada a su espalda, se encuentra la Catedral de Santa Anastasia de Zadar. La sede de la archidiócesis del condado de Zadar. Que fue construida entre los siglos XII y XIV en estilos románico tardío y gótico. Y puede presumir de ser la más grande de todas las que se pueden encontrar en una ruta por la Costa Dálmata.
El templo que vemos en la actualidad se construyó sobre los restos de una basílica paleocristiana anterior. Y, sin duda alguna, lo que más destaca de su exterior es su espectacular fachada de estilo románico toscano. Mientras que de su interior sobresale la sillería del coro decorada según los cánones del gótico flamígero.
Si tenéis ocasión (y está abierta), ¡no dejéis de subir a su torre! Deja unas vistas preciosas de toda la ciudad.
Plaza Narodni
Desde la catedral, os recomendamos continuar la visita recorriendo la ciudad hacia el sur por alguna de sus dos principales arterias comerciales: las calles Borelli y Siroka. Preferiblemente por esta segunda. Pues a mitad de ella os encontraréis enseguida con la Plaza del Pueblo (Narodni Trg). Indudablemente la más bonita de todo Zadar.
Alrededor de ella se conservan algunos de los edificios más emblemáticos de la ciudad que, milagrosamente, sobrevivieron a los estragos de la II Guerra Mundial. Entre los que destacan la Torre del Reloj, el Ayuntamiento, la Logia Municipal y la pequeña iglesia románica de San Lorenzo.
Plaza de los 5 Pozos
Si se continúa aún un poco más por la calle Siroka se llega a otra de las plazas más emblemáticas de Zadar: la Plaza de los 5 Pozos. ¿Y a que no adivináis por qué se llama así? Pues sí, precisamente por eso, porque cuenta con cinco pozos alineados.
Antes de su construcción se encontraba en ese lugar parte del foso que rodeaba la muralla de protección de la ciudad. Y, de hecho, si os fijáis, aún se ve una de sus paredes en uno de los costados de la plaza. Según leímos, los pozos fueron construidos por los venecianos en el siglo XV para ayudar a la ciudad a resistir el asedio turco. Y tal fue su utilidad que se mantuvieron en funcionamiento hasta 1838.
Puerta Terraferma
Precisamente enmarcada en esa muralla defensiva de Zadar estaba la Puerta Terraferma. Uno de los pocos elementos que se conservan de la misma y que está catalogado como el monumento renacentista más destacado y bonito de toda la ciudad.
Originalmente la puerta daba acceso a un puente levadizo sobre el foso que se ubicaba donde ahora se encuentran los cinco pozos de la plaza anterior. Y fue construida en 1537 con un marcado acento veneciano queda patente en el león alado que tiene en su parte superior.
Parque de la Reina Yelena Madievka
SI queréis tener las mejores vistas (y fotos) de la Puerta Terraferma o simplemente queréis dar un paseo agradable y desconectar, no dejéis de subir al Parque de la Reina Yelena Madievka. Un espacio de estilo romántico creado a finales del siglo XIX por el gobernador Van Walden. Y que puede presumir de constituir los jardines públicos más antiguos de todo el país.
Mercado de Zadar
Antes de acabar la visita de Zadar, la primera parada de nuestra ruta por la Costa Dálmata, no podéis dejar de acercaros al mercado de la ciudad. Que sigue celebrándose cada día al aire libre en el mismo lugar que lo hacía desde la Edad Media.
Además, si sois fans de comprar quesos, mieles o mermeladas artesanales para llevar a casa, ¡este es el lugar ideal!
Saludo al Sol y Órgano de Mar
El extremo norte de Zadar esconde dos sorpresas que estamos seguros de que os dejarán anonadados. La primera de ellas es el Saludo al Sol. Un enorme círculo, de más de veinte metros de diámetro, compuesto de infinidad de secciones de vidrio que, cuando cae la noche, se iluminan y brillan dando lugar a increíbles efectos visuales. Además de servir como paneles solares que alimentan a buena parte de la ciudad.
Según dicen, desde el saludo al sol se puede disfrutar de uno de los mejores atardeceres de Croacia y del mundo (nosotros nos lo perdimos porque llegamos más tarde). Pero es que además de los efectos visuales, el sonido también acompaña. Pues a pocos pasos se encuentra el Órgano de Mar. Un sistema acústico dentro de los pequeños escalones del paseo marítimo que hace sonar música con el batir de las olas.
Ambos elementos son obra del arquitecto croata Nikola Bašić. Y os aseguramos que, aunque simplemente vayáis de día, os dejarán completamente alucinados. Por no hablar de que son la mejor forma de despedirse de Zadar.
⭐ Sibenik
La siguiente parada de esta ruta por la Costa Dálmata es en Sibenik, a casi 90 kilómetros, como una hora en coche, de Zadar. La ciudad, que cuenta con unos cuarenta y dos mil habitantes, es también la capital del condado de Sibenik-Knin. Y tiene como particularidad que es una de las pocas ciudades de Dalmacia que no fue fundada por ilirios, griegos ni romanos. Si no que la primera referencia que hay de ella se remonta al año 1.066. Por lo que fue fundada por los dálmatas croatas bajo el mando de Petar Kresimir, Pedro el Grande.
A día de hoy, junto con Zadar, es uno de los principales núcleos urbanos y turísticos de la zona. Y puede presumir de contar con unas conexiones de acceso envidiables. Ya que cuenta con ferries que la conectan con las islas y puertos vecinos. Además de que está conectada vía Perkovic con la red de trenes del país. Por no hablar de que por carretera tan sólo hay que tomar la autopista E65 y seguir los carteles. O coger alguno de los autobuses que comunican la ciudad con el resto del país.
⛔ Una vez más, el centro de Sibenik es completamente peatonal. Lo bueno es que aparcamientos en los alrededores no faltan. Nosotros utilizamos el que está junto al puerto (tenéis la ubicación en el mapa) y nos parece una muy buena opción. Estuvimos un par de horas y no llego a 2€. ⛔
A continuación, os contamos que ver en Sibenik en un agradable paseo.
Iglesia de Santa Bárbara
Una buena forma de empezar a descubrir Sibenik es adentrarse en su casco histórico recorriendo la calle Kralja Tomislava, que lleva su nombre en honor al primer rey de Croacia. Por ella no se tarda en llegar a la pequeña y coqueta Iglesia de Santa Bárbara. Ubicada en un recodo a mano izquierda.
Justo delante de la iglesia nos llamó mucho la atención la estatua plateada de una niña sosteniendo un paraguas. Pero no fuimos capaces de averiguar su historia. Así que, si la sabéis o la descubrís, ¡nos la tenéis que contar! Nos quedamos superintrigados…
Plaza de la República
Literalmente al lado de la iglesia se encuentra la flamante Plaza de la República. En ella se encuentra el Palacio Episcopal. Así como el edificio del antiguo Ayuntamiento. Una preciosa construcción porticada de dos plantas del siglo XVI que tuvo que ser completamente reconstruida tras los bombardeos de la II Guerra Mundial. Y que en la actualidad lo que aloja es un espectacular restaurante.
Al fondo, en una esquinita de la plaza, tampoco hay que dejar de pasar a presentar respetos ante la estatua de Juraj Dalmatinac (Giorgio Dalmatico). Uno de los arquitectos más reputados de la historia de Croacia que se formó en la Venecia del siglo XV. Llegando incluso a participar en la decoración del Palacio Ducal de esa ciudad Y que se convirtió después en el artífice de buena parte de los edificios de Sibenik. Entre ellos, la flamante catedral.
Catedral de Santiago
También en la misma Plaza de la República está la Catedral de Santiago. Esa que diseñó en el siglo XV Giorgio Dalmático y que fue declarada Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en el año 2000.
Está levantada sobre un templo románico anterior. Y se construyó íntegramente en piedra caliza local y mármol blanco llevado desde la vecina isla de Brac. Combinando de una forma casi perfecta los estilos gótico y renacentista. Aunque lo que más suele llamar la atención de los visitantes es el friso de su fachada lateral en el que están representadas las 75 cabezas de los ciudadanos que aportaron dinero para su construcción.
Monasterio de San Lorenzo
Adentrándose hacia la parte superior de la ciudad callejeando por pasajes cada vez más estrechos, no se tarda en llegar al Monasterio de San Lorenzo. Del que habíamos leído que sus jardines eran impresionantes después de más de un siglo abandonados y una profunda remodelación. Y que la subida bien merecía la pena por poder verlos y dar un paseo. Sin embargo, cuando llegamos estaban cerrados. Igual que el monasterio en sí. Así que nos conformamos con darle una vuelta por fuera… ¡Y cuál fue nuestra sorpresa cuando descubrimos una pequeña capilla construida en una cueva!
No habíamos leído sobre ella en ningún sitio. Pero nos pareció tan curiosa que os recomendamos acercaros a echarle un vistazo.
Las 4 fortalezas de Sibenik
Sibenik fue un enclave de vital importancia para la defensa y la supervivencia de la antigua Dalmacia. Y por ese motivo contaba con varias fortalezas y bastiones defensivos a su alrededor. De los que a día de hoy quedan cuatro en pie:
- Fortaleza de San Nicolás. Es la única que se encuentra sobre el mar. Concretamente a la entrada del canal de San Antonio, en la isla Ljuljevac. Y puede presumir de ser uno de los mejores ejemplos de arquitectura defensiva de Dalmacia. Además de que pertenece al Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO como parte de las obras de defensa venecianas de los siglos XV-XVII.
- Fortaleza de San Miguel. Otra de las cuatro fortalezas de Sibenik es la de San Miguel. Está en tierra firme, pero a orillas del mar. Por lo que las vistas desde ella hacia el Adriático son espectaculares. Se puede subir a pie por una empinadísima cuesta desde el Monasterio de San Lorenzo.
- Fortaleza del Barón. Esta fortaleza fue la que decidimos visitar nosotros. Y es que sus vistas son más que preciosas. Pues se encarama sobre toda la ciudad de Sibenik. Y se divisa hasta la Fortaleza de San Miguel a orillas del mar. Pero, ¡ojo!, por mucho que Google maps os indique que se puede llegar en coche hasta ella, no es cierto. Hay que aparcar a unos cientos de metros y terminar de subir a pie. Nosotros hicimos caso al móvil y casi tenemos un disgusto… ja, ja, ja.
- Fortaleza de San Juan. Sería la última de las cuatro fortalezas de Sibenik que se conservan en pie. Es la que más alejada del centro se encuentra y la que en peor estado de conservación está. No obstante, ofrece también unas vistas de infarto de toda la costa.
Bodega Rak Winery
Si ya habéis leído en alguna ocasión las guías que publicamos, sabréis que siempre que podemos incluimos alguna cata de vino y/o de productos locales en nuestros viajes. Y en esta ruta por la Costa Dálmata decidimos visitar la bodega Rak Winery porque fue la única que encontramos abierta al público en el mes de abril, que era cuando viajamos. Y sólo tenemos palabras bonitas para ellos.
Empezando porque pudimos hacer toda la cata en su maravilloso porche con nuestros perritos. Y terminando por el exquisito trato del señor que nos guio en una degustación perfecta. Pasando, claro está, por la altísima calidad de los vinos y demás productos. Y es que se trata de un negocio familiar que ahora está en manos de dos hermanos que cuidan y miman cada detalle para honrar la memoria de su abuelo, quien había empezado con la empresa años atrás.
Aunque habíamos elegido la cata de 3 vinos con aperitivos fríos, nos recomendaron hacer la de 4 para poder probar así todas las variedades que producen. Y tenemos que decir que fue un éxito: tomamos primero los dos blancos, frescos y ligeros; después el rosado, que nos sorprendió gratamente; y terminamos con un espectacular tinto que hubiéramos deseado que no se acabase (de hecho, nos llevamos una botella y nos hubiéramos llevado más si no fuera porque no nos cabían en la maleta).
Todo ello vino acompañado de un jamón curado (bastante bueno, aunque siendo españoles nunca nos parecerán como los nuestros), una tabla de quesos deliciosos, pan casero que, según nos dijo el dueño, lo hacía su mujer; aceitunas y aceite de oliva, también de producción propia.
Nos resultó una auténtica delicia para todos los sentidos. Y creemos que es una experiencia maravillosa que no podemos más que recomendar.
⭐ Trogir
Para terminar esta pequeña ruta por la Costa Dálmata os recomendamos recorrer otros 50 kilómetros más hacia el sur hasta llegar a Trogir. Una pequeña ciudad de poco más de diez mil habitantes que se construyó, literalmente, sobre una isla que se acabó uniendo al continente. Pero no os dejéis engañar por sus dimensiones. Su centro histórico está considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO desde 1997. Porque, además, resulta que fue fundada en el siglo III a.C. Lo que la convierte en una de las ciudades más antiguas de la región.
Para llegar a Trogir una opción puede ser en alguno de los ferries que la conectan con Split y con las islas más cercanas. Si no, la mejor forma de acceder es por carretera. Bien sea en coche, a través de la consabida autopista E65. O en alguna de las líneas de autobús que cubren toda la ruta por la Costa Dálmata.
⛔ Una vez más y como es lógico, el casco histórico de Trogir, que ocupa lo que era aquella isla original, es peatonal. Por lo que hay que dejar el coche en el enorme aparcamiento (lo tenéis indicado en el mapa) que hay antes de cruzar el puente que da acceso al centro. ⛔
Después, ya a pie, ¡no os perdáis el coqueto recinto amurallado de Trogir!
Puerta de la Tierra
Aunque no es la única, la principal puerta que da acceso al casco antiguo de Trogir es la conocida como la Puerta de la Tierra. En cuya parte superior hay una estatua de Giovanni Orsini. El beato patrón y protector de la ciudad.
Si habéis aparcado donde os hemos dicho, será por donde entréis a la ciudad después de cruzar el puente.
Palacio Cipiko
Una vez dentro de la ciudad, no podéis dejar de coger la calle Gradska. Que lleva al auténtico corazón de Trogir, la Plaza de Juan Pablo II. Pero antes, hay un par de rincones que merece la pena descubrir. El primero de ellos sería el Palacio Cipiko. Una residencia señorial del siglo XV que perteneció a la familia homónima. Y cuya fachada, con columnas y relieves, es una muestra perfecta de la arquitectura veneciana.
Catedral de San Lorenzo
Justo frente al palacio se encuentra otro de esos imprescindibles que ver en Trogir: la Catedral de San Lorenzo. Su construcción empezó en torno al año 1200, pero se prolongó durante casi 400 años, hasta 1589. Por lo que presenta prácticamente todos los estilos arquitectónicos. Aunque lo que más destacaría sería su campanario de 47 metros. Que presenta una planta de cada estilo (gótico, gótico veneciano, renacentista y barroco), según la época en la que se levantó cada una de ellas. Así como la fachada occidental, plagada de finos detalles.
También es posible descubrir en su interior la coqueta capilla de Juan de Trogir. O subir a la torre para disfrutar de las vistas de la ciudad.
Plaza Juan Pablo II
Tras pasar por delante de la iglesia estaremos al fin en la Plaza de Juan Pablo II. El verdadero corazón de Trogir. En ella, además de parte de la catedral, se encuentran otros de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Como el Palacio de los Rectores. Un edificio del siglo XII de estilos gótico y renacentista que, desde el siglo XIX, hace las veces de Ayuntamiento.
O la pequeña Iglesia de San Salvador. Que fue construida para proteger a la ciudad de una epidemia de peste sobre los restos de otra pequeña iglesia dedicada a Santa María. Su interior es muy modesto, pero destaca por su Torre del Reloj. Una construcción de 50 metros decorada con diversas esculturas.
También junto a la iglesia, se puede ver una antigua Loggia Veneciana. Una terraza con columnas y estatuas romanas que son otro de los mejores vestigios del dominio de la República de Venecia sobre la ciudad.
Paseo marítimo
Desde la plaza de Juan Pablo II toca callejear un poco por el encantador centro de Trogir hasta alcanzar el flamante paseo marítimo. Os recomendamos recorrerlo entero. Pero antes, no dejéis de cruzar, o al menos acercaros, al puente Čiovski. El mejor lugar para admirar las antiguas casitas de pescadores ahora reconvertidas en tiendecitas de todo tipo.
Iglesia de Santo Domingo
A mitad del paseo marítimo se encuentra otro de los rincones imprescindibles que ver en Trogir: la Iglesia de Santo Domingo. Este templo fue construido entre 1280 y 1425 por los monjes dominicos como parte de un monasterio. Aunque tuvo que ser reconstruido prácticamente entero tras los bombardeos de la II Guerra Mundial.
Según habíamos leído, su altar mayor y su claustro son una maravilla. Sin embargo, nosotros nos quedamos sin verlos porque había misa y las visitas no estaban permitidas.
Castillo de Camarlengo
Para terminar la visita de Trogir (y esta ruta por la Costa Dálmata), al final del paseo marítimo no hay que perderse el Castillo de Camarlengo. Que fue construido por los venecianos en el siglo XV para defender la ciudad de los ataques por mar. Aunque hoy en día se utiliza como espacio de conciertos y exposiciones.
⚓ Las mejores actividades para completar vuestro viaje
Por otro lado, si preferís que un guía experto os acompañe y desvele todos los secretos de la Costa Dálmata, una región cargada de historia y de rincones para descubrir; o tenéis más días en la zona y queréis completar vuestro viaje, no os perdáis todas las actividades, excursiones y visitas que ofrece Civitatis.
Aunque tened en cuenta que en esta región muchas de ellas operan sólo en inglés…
☕ Ruta por la Costa Dálmata: dónde comer
En todas las ciudades de la ruta por la Costa Dálmata de las que os hemos hablado encontraréis un sinfín de locales para disfrutar de la mejor gastronomía croata. Pero, como en todas las zonas turísticas del mundo, elegir un restaurante al azar puede no siempre salir bien. Así que nos vamos a permitir haceros dos recomendaciones:
- Konoba Malo Misto (Zadar): nuestra experiencia en este restaurante fue totalmente maravillosa. Llegamos de noche y diluviando. Y enseguida nos buscaron un hueco, nos encendieron las estufas y nos dieron mantas para entrar en calor. Probamos la típica pasticada dálmata, que consiste en carne guisada con una salsa a base de vino e higos y que se sirve acompañada de ñoquis caseros. ¡¡Una maravilla!! También, como era la semana del espárrago en Zadar, por recomendación del camarero, tomamos un guiso de calamares con polenta de espárragos que estaba espectacular. En total, con una botella de vino y propina incluida, pagamos 67€. Es cierto que fue de las cenas más caras del viaje. Pero la calidad y la cantidad de las raciones, así como el entorno y el servicio, creemos que merecieron la pena.
- Restaurant Argola (Sibenik): Después de una mañana de carretera y de turismo, al llegar a Sibenik era la hora del almuerzo y este restaurante fue el que mejor pinta nos dio. Simplemente tomamos unas cervezas y un Soparnik, una especie de masa de pizza rellena de acelgas muy típica de Croacia que estaba muy rica. Además, la terraza era muy agradable, el camarero fue muy amable y, ¡hablaba español! En cuanto al precio, 20€, no nos pareció barato. Pero bueno, tampoco nos pareció mal del todo teniendo en cuenta los precios que empezamos a ver según bajábamos hacia el sur.
⛺ Dónde alojarse en la Costa Dálmata
A lo largo de esta, o cualquier otra, ruta por la Costa Dálmata no faltan las opciones de alojamiento. Sin embargo, igual que lo notamos en la gastronomía, a medida que nos íbamos adentrando en el sur del país las opciones buenas, bonitas y baratas iban escaseando cada vez más. Por eso en algunos lugares tuvimos que optar por opciones bastante justitas. Y en otros no nos quedó más remedio que estirar un poco más el presupuesto…
Pero bueno, yendo al grano, nosotros establecimos tres bases de operaciones. En Zadar, en Split y en Dubrovnik. Y en el caso de Zadar, como sólo iba a ser una noche, decidimos bajar un poco el listón. Así que nos quedamos en un hostel en toda regla. Se llama Boutique Hostel Forum. Y, aunque nos pareció que no está nada mal y cumplió su función con creces, nos resultó caro para lo que era. Pagamos 84€ por una noche en habitación doble con baño privado… Pero una vez más, creemos que en el sur de Croacia la relación calidad-precio baja mucho. Por lo que no pensamos que sea una mala opción.
Lo mejor que tiene Boutique Hostel Forum es su incomparable ubicación. Está en pleno corazón de Zadar. Literalmente a un paso de todo. Además, las camas son muy cómodas y el personal de recepción es muy amable. Sin embargo, las habitaciones son superpequeñas. Y eso que cogimos habitación doble con baño privado… ¡¡No nos queremos imaginar cómo eran las habitaciones compartidas!!
..
Por otro lado, el desayuno incluido en el precio, era escasísimo. Cafés y zumos de máquina, algo de bollería y para de contar. Por no hablar de que se hace en una sala con solo cuatro mesas que se abarrotan de gente y apenas se puede entrar (nosotros optamos por llevarnos las cosas a la habitación). Además, no tiene parking (ni acuerdo con ningún parking cercano) y es bastante difícil conseguir aparcar en la ciudad. Y, para más inri, como en toda Croacia, no hay ascensor, por lo que hay que subir cargando con todo el equipaje por las escaleras.
Aun así, como os decimos, viendo los precios de la zona, creemos que puede ser una muy buena opción para alojarse en el corazón de Zadar si lleváis un presupuesto relativamente ajustado.
Pero, de cualquier forma, si queréis reservar el alojamiento de vuestros sueños en una ruta por la Costa Dálmata al mejor precio, ¡¡no dudes en usar nuestro link!! A vosotros no os costará más y a nosotros nos ayudaréis a seguir creando contenido.
⭐ Busca, encuentra y haz tu RESERVA de alojamiento en la Costa Dálmata a través de Booking.com desde aquí ⭐
..
Y hasta aquí esta guía para hacer una ruta por la Costa Dálmata de Zadar, Sibenik y Trogir en un día. La parte menos conocida del sur de Croacia.
✈️ Organiza tu viaje a Croacia:..✏️ Descubre TODOS LOS POSTS que hemos publicado sobre Croacia. ☑️ Encuentra las MEJORES OFERTAS de alojamiento en el país. ⛵ Añade VISITAS GUIADAS Y EXCURSIONES en Croacia en español. ☝️ Contrata el mejor seguro de viajes con nuestro 5% DE DESCUENTO EN IATI SEGUROS. ✍️ ¿Prefieres no tener que preocuparte de nada? Descubre nuestra ASESORÍA GRATUITA. |
Espero que esta guía para organizar una ruta por la Costa Dálmata os haya sido superútil. Si tenéis cualquier duda o pregunta, os animo a dejar un comentario o escribirnos por email. ¡Hasta muy pronto viajerxs!
Y si queréis estar al tanto de todas las novedades, no dejéis de seguirnos en instagram: @miventanalmundo