Qué ver en el norte de Fuerteventura. 10 visitas para 1 o 2 días.

Generalmente en la mayoría de las Islas Canarias las zonas del norte destacan por sus escarpados acantilados y sus playas de piedra o piscinas naturales. Que contrastan notablemente con el paisaje del sur. Donde suele haber apacibles y desérticas playas de arena. Del mismo modo, en esas zonas septentrionales aumenta la vegetación y el clima se vuelve más fresco y húmedo. Pero estamos en una isla fuera de lo común. Y cómo podréis comprobar en estos 10 lugares que ver en el norte de Fuerteventura, este extremo de la isla es igual de árido y tiene las mismas espectaculares playas que su sur.

Y seguramente por eso para muchos canarios Fuerteventura es «la playa del archipiélago«. Sí. Ya sé que puede parecer una tontería porque todas las islas tienen muchas playas. Pero generalmente en el norte (y en algunas islas como La Palma, La Gomera o El Hierro en toda su extensión) nos encontramos con playas de cantos rodados y arena negra. Por lo que esas paradisíacas extensiones de polvo dorado en todo el perímetro hacen de Fuerteventura la isla más playera de todas.

Aun así, no penséis que todo va a ser sol y mar en esta ruta por el norte de Fuerteventura. También hay otro tipo de lugares especiales que merece la pena visitar para conocer bien toda la isla.

¿Os animáis a descubrirlos?

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✨ Qué ver en el norte de Fuerteventura

Antes de entrar en materia, si no se va a estar a estar muchos días en la isla, nuestra recomendación es alojarse en la zona centro para tener todo, tanto el norte como el sur, más o menos a mano. Dos buenas opciones pueden ser la capital, Puerto del Rosario (donde está el aeropuerto). O en su vecina Caleta de Fuste. Ya que ofrecen un montón de alojamientos buenos y a buen precio.

Así que para esta ruta por todo lo que ver en el norte de Fuerteventura os proponemos salir desde allí, como podéis ver en el mapa. Pero si os alojáis en cualquier otra parte, sólo tenéis que adaptar el sentido del itinerario.

Aunque se podría ver todo (un poco deprisa y corriendo) en un solo día, si disponéis de una semana entera en la isla, os recomendamos dividir esta ruta en 2 jornadas. Así tendréis tiempo para sobra de disfrutar de cada rincón y de relajaros un poco en sus playas que, como ya hemos dicho, bien merecen la pena. Si no es así y vais más justos, seguramente lo mejor sea que elijáis los lugares que no os queréis perder y el resto os los reservéis para cuando volváis a la isla. Así tenéis una excusa.

Y ahora sí que sí, ¡¡empezamos!!

1. Tetir y La Matilla

Dos buenos lugares para empezar el primer día de ruta por los imprescindibles que ver en el norte de Fuerteventura son las pequeñas aldeas de Tetir y La Matilla. Muy chiquititas y coquetas. Ambas se consolidaron alrededor de sus iglesias como era tradición y parece que el tiempo no ha pasado por ellas.

A poco más de 10 minutos de la capital, la primera con la que nos encontramos es con Tetir. Donde destaca su sencilla iglesia del siglo XVIII, consagrada a Santo Domingo de Guzmán. Pero que su exterior no os engañe, en su interior se esconden algunas joyas en su altar mayor y sus pinturas. Lo que le han valido la consideración de Bien de Interés Cultural desde 1986.

Y lo mismo ocurre con la de La Matilla, dedicada en esta ocasión a Nuestra Señora del Socorro. Es mucho más sencilla y pequeña, pero que también tiene la consideración de BIC por el patrimonio que alberga en su interior.

2. Tindaya

Siguiendo la carretera hacia el interior de la isla, la siguiente parada imprescindible es en Tinadaya. Que con sus 400 metros de altura es una de las montañas más altas de la Fuerteventura. Y eso ya es decir en una isla que apenas supera los 800 metros de altitud. Aunque por lo que destaca en realidad es porque era un lugar sagrado para los majoreros, los aborígenes de Fuerteventura.

Hasta hace bien poco se podía conocer más de la historia de la montaña en el museo Casa Alta de Tindaya. Pero de momento permanece cerrado hasta nuevo aviso ya que está sufriendo un importante proceso de remodelación.

Pero no os preocupéis, hay mas cosas que ver y que hacer en la zona. Empezando por husmear en la tienda de Quesos Tindaya. Una de las más populares de la isla y el mejor lugar para descubrir este manjar (si te gusta el queso, claro).

Después, tampoco hay que dejar de subir al Mirador de Vallebrón. Desde donde se puede ver una espectacular panorámica de la Montaña de Tindaya y de prácticamente toda la isla. Si no hay calima, claro.

A continuación, saliendo de Tindaya, de camino hacia nuestro siguiente destino, se puede parar en el Monumento a Unamuno. Una estatua que está prácticamente en medio de la nada y que homenajea al escritor y sus meses de destierro en la isla.

3. Puertito de los Molinos

Y ahora sí que sí, llegamos al primer chapuzón del día: el Puertito de los Molinos. Un pequeño pueblo (más bien unas cuantas casitas) con una igual de pequeña playita que hemos descubierto en nuestro último viaje a la isla y que nos ha robado el corazón. Por eso lo hemos incluido en nuestro top de cosas que ver en el norte de Fuerteventura.

Os recomendamos llegar temprano ya que sólo hay unas pocas plazas de aparcamiento en un terraplén al final de la carretera. Desde allí, podéis cruzar un puentecito rojo bajo el que corre el agua del barranco para ir directamente a la playa. Que, aunque no lo parezca entre tanta piedra, ¡¡también es de arena dorada!!

O podéis seguir el caminito que sube por la montaña para contemplar las vistas de la playa y los acantilados desde las alturas.

Desde el Puertito se puede seguir unos dos kilómetros por otra pista sin asfaltar hacia el norte, aunque no os lo recomendamos si no lleváis un coche potente y con los bajos altos. Eso sí, si os animáis, encontraréis otras dos joyas: la Playa del Jarubo y la de las Mujeres. Menos masificadas y perfectas para desconectar de absolutamente todo.

4. La Oliva, la penúltima capital

Después de un remojón en el Puertito, la siguiente parada es en La Oliva. La anterior capital de Fuerteventura y una de sus principales ciudades modernas.

Su historia gira en torno a los Coroneles de las Milicias. Quienes se establecieron allí en los siglos XVIII y XIX y atesoraron todo el poder de la isla. Dejando en La Oliva un importante patrimonio que se concentra en 5 edificios que se pueden recorrer siguiendo la llamada “Ruta de los Coroneles”.

La primera parada de la ruta es en la Casa de la Cilla (Museo del Grano). Donde se puede descubrir la tradición agrícola majorera. Abre de martes a sábado de 10 a 17. Y cuesta 1,5 €.

A continuación, no hay que perderse la Iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria, abierta prácticamente a todas horas. Es de estilo mudéjar y representa perfectamente la arquitectura popular canaria. Además, destaca por su Retablo Mayor del pintor canario Juan de Miranda Cejas.

Después, tampoco hay que perderse la Casa de los Coroneles. Un singular edificio del siglo XVIII donde conocer todos los entresijos de Fuerteventura, La Oliva y del propio edificio. La entrada cuesta 3€ y abre de martes a sábado de 10 a 20.

Justo enfrente también se puede visitar el Centro de Arte Canario – Casa Mané. Con obras de artistas de la talla de César Manrique o Lola Massieu. La entrada son 4€ y abre de lunes a viernes de 10 a 17. Y los sábados hasta las 14.

Por último, antes de dejar atrás La Oliva, se puede acabar en el Mercado de las Tradiciones, situado en la antigua Casa del Coronel (otro edificio militar). El lugar perfecto para adquirir productos locales. Tanto agrícolas como de artesanía. Pero sólo abre los martes y jueves por las mañanas.

Bono para la Ruta de los Coroneles

Si vuestra visita a La Oliva coincide con un martes o con un viernes por la mañana, estáis de suerte. Por 8€ se puede adquirir tanto en la Casa de los Coroneles como en La Cilla un bono para recorrer todos los puntos de interés.

Y, además, los viernes a las 10:30 adquiriendo ese bono y con reserva previa os podéis unir a una visita teatralizada por la ruta para descubrir todos los secretos de La Oliva.

Lo organiza todo la asociación Raíz del Pueblo. Así que si queréis más información sobre estas visitas, no dudéis en escribir a info@raizdelpueblo.org o llamar al 928 868 015.

5. Molinos de Villaverde

¿Sabíais que no solo existen los molinos si no que también hay molinas? Pues sí. Y en Fuerteventura hay de ambos. Todo con el fin de aprovechar los fuertes vientos que dan nombre a la isla y que tan útiles han resultado a lo largo de la historia para moler grano. Principalmente el de maíz. Que además se tuesta para la obtención del gofio. Uno de los productos más típicos de Canarias.

Los primeros, los masculinos, fueron introducidos por los castellanos en torno al siglo XVII y se parecen mucho a los típicos molinos manchegos. Son construcciones cilíndricas y suelen tener 4-6 aspas. Mientras que las molinas, las femeninas, son más modernas (surgieron en torno al siglo XIX) y son estructuras más ligeras. Consisten generalmente en las aspas acopladas a la parte superior de un granero rectangular.

Seguro que en vuestros días en la isla los veis con relativa frecuencia, pero quizás los más llamativos sean los de Villaverde. Y por eso los hemos incluido en esta ruta por todo lo que ver en el norte de Fuerteventura.

Están a unos 3 kilómetros al norte de La Oliva. Así que no dudéis en acercaros.

6. El Cotillo

Nacido como un pequeño pueblo de pescadores, El Cotillo es uno de nuestros rincones preferidos que ver en el norte de Fuerteventura. Originalmente era el epicentro del Reino Aborigen de Maxorata, pero tras la conquista la zona quedó prácticamente olvidada hasta que los pescadores se instalaron en ella.

En los últimos años ha ido creciendo y cada vez son más y más los turistas que llegan. Aunque por suerte (y esperemos que por mucho tiempo), sigue manteniendo su esencia de casitas bajas que se alejan de las moles urbanizadas de otras zonas. Pero aun así se ha convertido en un lugar ideal para alojarse y comer o cenar.

Como restos de su pasado, todavía pueden verse el Molino del Roque y el Castillo del Tostón.

Sin embargo, por lo que destaca El Cotillo es por sus kilómetros y kilómetros de playas de arena dorada. En las que hay que hacer una parada sí o sí. Y, puesto que están orientadas al oeste, si tenéis días de sobra en la isla, son el lugar perfecto para apurar todas las horas de luz del día y disfrutar de una puesta de sol increíble.

Tanto las del norte como las del sur son fantásticas. Pero si tenemos que elegir, las del sur son nuestras favoritas de toooda la isla. Son enormes y están resguardadas por acantilados que hacen que, por mucha gente que haya, sigan siendo todo un remanso de paz.

Si os cansáis de estar al sol, también se puede llegar hasta el extremo norte del Cotillo. Donde está el Faro del Tostón. En cuyo interior puede visitarse el Museo de la Pesca Tradicional.

Y donde las Piscinas del Marrajo son otro lugar perfecto para seguir chapoteando un ratito más.

7. Calderón Hondo

Aunque para nosotros es una de las visitas que quitaríamos si fuésemos justitos de tiempo, esta ruta por los imprescindibles que ver en el norte de Fuerteventura tiene que incluir el volcán del Calderón Hondo. Uno de los siete volcanes alineados que impulsaron el crecimiento la isla y a los que se conoce como Alineación del Bayuyo.

Hay un sendero circular de unos 5 kilómetros mediante el que se pueden subir los casi 280m que llevan su cima. Y desde donde puede verse perfectamente su cráter, con una profundidad de unos 70m. Además, si el clima acompaña, es decir, si no hay calima, pueden verse algunas de las mejores panorámicas de la isla.

Te recomendamos hacer esta ruta a primerísima hora de la mañana. Cuando no haga mucho calor. Porque hay que tener en cuenta que no hay ninguna sombra ni vegetación de ningún tipo. Y recorrer el camino en horas muy calurosas puede ser peligroso. Por eso, si dividís estos imprescindibles que ver en el norte de Fuerteventura en dos días, puede ser el lugar ideal para empezar la segunda jornada.

8. Popcorn Beach (o Playa de las Palomitas)

Esta playa del extremo norte de la isla es otro de nuestros últimos descubrimientos. Y desde que pusimos un pie en ella nos enamoramos. Así que no nos quedaba más remedio que incluirla en esta lista de cosas que ver en el norte de Fuerteventura. Pero, ¡ojo! el acceso es por una pista sin asfaltar y llena de baches. Así que, aunque puede hacerse con un coche normal y corriente yendo muy despacito, hay que tener cuidado. Sobre todo si os aventuráis en un coche de alquiler.

Pero antes de enseñárosla he de deciros que no es una playa de “palomitas”, ni mucho menos. Y que ni siquiera se llama así en realidad, aunque esa sea el nombre por el que todo el mundo la conoce últimamente. Su verdadero nombre es Bajo del Mejillón. Y esas “palomitas” son realmente rodolitos. Unas estructuras calcáreas de algas coralinas que el mar arrastra hasta la costa. Cuando están vivas dentro del agua sirven de alimento y refugio para los peces. Pero al morir llegan hasta la playa solidificándose y dando lugar a esas curiosas formaciones que parecen palomitas de maíz.

Por favor, cuida de este sitio maravilloso

Poniéndonos serios de nuevo, os recomiendo visitar y disfrutar a tope de esta joya de la naturaleza, pero por favor no te lleves ninguna “palomita” de recuerdo. No pienses que total, por una no pasa nada. Si todos lo hiciésemos, la playa quedaría desierta en un pispás.

¿Y por qué te cuento todo esto?

• Pues porque en los últimos años la cantidad de rodolitos ha menguado considerablemente.
• Porque son parte de un ecosistema maravilloso y alterándolo puede haber otras muchas especies que paguen las consecuencias quedándose sin su hogar natural. Que en lugar de estar donde debería estar y donde lleva cientos de años, se está repartiendo por las casas de miles de turistas.
• Y porque igual que tú has disfrutado, habrá mucha más gente que quiera hacerlo después. La naturaleza es de todos. Y todos somos responsables de cuidarla y conservarla para que podamos seguir teniéndola mucho tiempo.

9. Corralejo

Aunque sólo con echar un vistazo podríamos equiparar (guardando las distancias, claro) a Corralejo con otros lugares mega turísticos, como podrían ser Benidorm o incluso Magaluf, lo cierto es que esconde algunos rincones que merecen la pena. Por eso, si dedicáis dos o más días a conocer los mejores lugares que ver en el norte de Fuerteventura, no dejéis de incluir una parada.

Su zona antigua sigue conservando su encanto original. El de cuando sólo era un pueblo pesquero. Así que, huyendo de la zona más masificada, se puede callejear y encontrar restaurantes en los que comer el mejor pescado fresco. Y la Playa de Corralejo Viejo sigue teniendo su encanto para tomar una copa por la tarde.

Además, no podemos olvidar que es un importante nudo de comunicaciones para Fuerteventura. Desde su puesto parten los barcos que conectan con la vecina Lanzarote. Y los ferries que van a la Isla de Lobos.

Por otro lado, si queréis ir a la playa con vuestro perro en Fuerteventura, el Charco de Bristol, al noroeste del pueblo, es una de las pocas en las que es legal llevar a tu peludo (aunque ya os contaré en otro post todo lo que puedes hacer con tu mascota en la isla).

10. Dunas de Corralejo

Y ahora sí que sí, llegamos al final de esta lista de qué ver en el norte de Fuerteventura y lo hacemos con una de las joyas de la corona de la isla: las impresionantísimas Dunas de Corralejo. Un flamante Parque Natural de más de 10 kilómetros de extensión en la costa este, justo al sur de la ciudad que le da nombre.

A la zona también se la conoce como Grandes Playas y en sus extremos norte y sur cuenta con todas las facilidades. Desde enormes hoteles de gama media-alta hasta servicio de hamacas y sombrillas en la arena. Sin embargo, para nuestro gusto, la mejor zona es la del centro. Donde lo salvaje se adueña del terreno.

Por lo general (y como seguramente veréis), la gente aparca en los arcenes de la carretera y baja andado a la playa. Ya que no hay otro lugar para dejar los coches. Así que, aunque son 10 kilómetros, si llegáis muy tarde puede resultaros difícil encontrar un hueco hasta principios de la tarde, cuando mucha gente empieza a irse.

✔️ Cómo organizar esta ruta en 1 o 2 días

Bien, como os decía al principio, si sólo tenéis 1 día, ver todo lo que os hemos contado es prácticamente imposible. Y menos aún si queréis bañaros y disfrutar de alguna playa (que os garantizo que merecen la pena). Así que, si este es vuestro caso, os recomiendo elegir y quedaros con lo que más os apetezca ver y hacer. Y que lo disfrutéis con calma.  Aunque La Oliva, el Cotillo y las Dunas de Corralejo son tres lugares que no os deberíais perder.

Por el contrario, si tenéis dos días (o más) estáis de suerte. Tendréis tiempo suficiente para verlo todo, todito. Y nuestra recomendación es que sigáis más o menos el orden que os proponemos.

En un primer día se puede visitar Tetir, La Matilla, Tindaya, el Puertito de los Molinos, La Oliva y los Molinos de Villaverde. Y terminar pasando toda la tarde y viendo la puesta de sol en alguna playa de El Cotillo.

Mientras que el segundo día os proponemos empezarlo subiendo al Calderón Hondo. Para después bajar hasta la Playa de las Palomitas, comer y dar un paseo por el pueblo de Corralejo y acabar descansando en el Parque Natural de las Dunas.

☕ Dónde comer en la zona

Aunque no somos expertos en dónde comer en Fuerteventura, ya que cuando vamos con plan de playa somos muy de bocatas en la arena y picoteos en el apartamento, sí que nos vamos a animar a recomendaros algunos sitios muy chulis en los que estuvimos en nuestra última escapada y de los que salimos encantados.

En primer lugar, tenemos que hablar de Lajares. Un pueblecito al norte de La Oliva que muchos definen como el epicentro de la vida hípster de la isla. Así que está atrayendo a mucho turismo alternativo y a nómadas digitales. Con la consiguiente proliferación de cafeterías, bares, restaurantes, chill-outs…

Y dos de nuestros descubrimientos fueron allí. Ambos, todo hay que decirlo, recomendación del dueño del apartamento en el que nos alojamos:

• Los Pinchitos: un bar – restaurante de tapas típicas canarias y majoreras. Perfecto para probar platos isleños como la carne de cabra. Y sobre todo para hacerlo al mejor precio. Tienen una terracita agradable y un interior precioso.

• El Goloso: que lo que te apetece es desayunar, tomar un café y un postre después de comer o, incluso, comprar unos sándwiches o bocadillos para llevar a la playa, pues en el Goloso tienes los mejores. Os garantizo que sus croissants y sus caracolas son una auténtica perdición.

Por otro lado, si pasáis por Corralejo y os apetece un heladito, tenéis que probar los de El Gusto. Una heladería italiana que prepara sus helados con leche de cabra y otros productos de proximidad. Como el tuno indio, los higos o los conocidísimos plátanos de canarias.

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Espero que esta guía para recorrer el norte de Fuerteventura os haya sido superútil. Si tenéis cualquier duda o pregunta, os animo a dejar un comentario o escribirnos por email. ¡Hasta muy pronto viajerxs!

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